Los materiales empleados para la impermeabilización de los embalses son principalmente Polietileno de Alta Densidad (PEAD) y Policloruro de Vinilo (PVC). Ambos materiales son muy resistentes al envejecimiento y al crecimiento de las raíces y/o desgarros, y en los dos casos es conveniente la instalación de geotextil, que sirve de base y apoyo y les confiera alta resistencia frente a perforaciones.


Las membranas de intemperie para impermeabilización son adecuadas para embalses, lagos, presas, canales, terrazas, etc. Además, poseen una excelente estabilidad frente a los rayos U.V. y se fabrican a partir de resinas vírgenes, que garantizan su durabilidad.