El riego por aspersión consiste en aplicar agua al cultivo en forma de llovizna.

Con este método se alcanzan eficiencias de aplicación entre 80 y 85% pero se requiere una alta inversión inicial de capital en los sistemas de distribución y aplicación más el costo de la mano de obra y el mantenimiento de los equipos. En este método de riego es importante suministrar la cantidad precisa de agua que requiere la motobomba y bifurcar las líneas laterales para balancear las presiones de los aspersores.